
La web de estilo y cultura popular Culted puso nombre hace unos días a un síndrome cinematográfico que todos habíamos notado pero al que dábamos vueltas sin ser capaces de definirlo con concreción o de ponerle un nombre. ¿El síndrome? Algo así como un anacronismo físico: rostros y cuerpos en cintas de época que estaban… fuera de su época. ¿El nombre que le ha dado Culted? “Cara de iPhone” (iPhone Face). “La cara de iPhone se da cuando las características de una persona resultan tan modernas que como espectador simplemente sabes que esa persona ha visto alguna vez un iPhone”, escribe Robyn Pullen en Culted. “Ya sea por las facciones de su rostro, por sus dientes o por su aura en general. Mucha gente podría pensar que se debe a cirugía plástica, carillas o peinados y maquillaje ultramodernos, pero tener cara de iPhone puede consistir, simplemente, en la onda que alguien transmite”