
Albert Einstein envió un telegrama de apoyo a Miguel de Unamuno como expresión de afecto y desagravio por el destierro y exilio que el pensador vasco sufrió en Fuerteventura, París y Hendaya entre 1924 y 1930, un documento hallado en el fondo que custodia la Universidad de Salamanca. Einstein ya era un personaje de prestigio mundial, había ganado el premio Nobel de Física en 1921, cuando firmó la correspondencia, que también suscriben una veintena de personalidades de Alemania, redactado en el idioma de ese país y presentado este lunes en la Casa Museo de Unamuno, que dirige Ana Chaguaceda.