
Madison Keys se proclamó este sábado campeona del Open de Australia al derrotar en la final a la número uno del mundo, Aryna Sabalenka, por 6-3, 2-6 y 7-5 (en 2h 02m). La estadounidense, de 29 y 14ª del mundo, sorprendió a la líder del circuito con un tenis demoledor de principio a fin y logró el primer grande de su carrera, después de que cediera en la final del US Open de 2017 frente a Sloane Stephens. Tenista regular, sin altos galardones pero fija en la planta noble del circuito, la norteamericana redondeó un magnífico torneo en el que apeó previamente a jugadoras de la talla de Daniel Collins, Elena Rybakina, Elena Svitolina o Iga Swiatek. En ningún momento titubeó este sábado y zanjó así la extraordinaria secuencia de victorias de la bielorrusa, imparable desde 2023; desde entonces, 20 seguidas. El éxito le permitirá a Keys acceder al top-10 de la WTA y situarse en la séptima posición, por lo que iguala su mejor ranking.