En un mundo donde se multiplican los conflictos, con una guerra en suelo europeo que dura ya casi tres años y otra a las puertas del continente, no extraña que la geopolítica se haya colado entre las inquietudes de muchas empresas. Para el sector inmobiliario europeo, de hecho, ya es la mayor preocupación que existe. La inestabilidad política internacional asciende al primer lugar de la clasificación que elaboran cada año la consultora PwC y el lobby Urban Land Institute, según el informe de Tendencias en el mercado inmobiliario en Europa 2025. El documento, que ha sido presentado este martes en Madrid, sitúa como segundo dolor de cabeza más citado la posibilidad de escaladas bélicas en Europa o en Oriente Próximo. Y otros dos factores exógenos a lo económico, la inestabilidad política dentro del continente y los problemas medioambientales, aparecen también entre las 10 primeras posiciones.