
Dura apenas un segundo. Un instante en el que más de 25 millones de personas en España contienen el aliento. Este domingo 22 de diciembre, los ojos del 76% de la población adulta estarán puestos en el bolillero del Sorteo Extraordinario de Navidad. Y todos aspirarán a lo mismo: sacarse el Gordo. Al final, un puñado de personas resultarán ganadoras, pero los efectos de esa suerte se derramarán por todo el país y tendrán efectos (y algunos riesgos) reales, no solo en la psicología de una comunidad, sino también en su economía.