
El Gobierno afronta otro trago amargo en los tribunales con los interrogatorios programados esta semana en el caso Ábalos y en el caso Begoña Gómez. La oposición se prepara para aprovechar la intensa agenda judicial marcada en esta recta final del curso político, antes de que el presidente Pedro Sánchez haga el tradicional balance de año, previsto para la siguiente semana. El Ejecutivo estará muy atento a las palabras del empresario Víctor de Aldama. El comisionista acude a declarar este lunes al Tribunal Supremo después de hacerlo en noviembre en la Audiencia Nacional, donde desató una enorme tormenta con nuevas imputaciones contra la Administración socialista; y después de que un informe del Ministerio de Transportes, avanzado por EL PAÍS este domingo, desmintiese sus acusaciones sobre los amaños de obra pública. El miércoles también se ha señalado en rojo: ese día, la esposa de Pedro Sánchez, Begoña Gómez, debe comparecer ante el magistrado Juan Carlos Peinado, que la mantiene imputada desde el pasado abril.