
Sin alma, sin rumbo, sin dirección… ¿Sin solución? El Espanyol cayó goleado en la visita a Montilivi y la situación es cada vez más crítica en el club perico. Hundidos en los puestos de descenso con tan solo 10 puntos en 13 jornadas, el equipo blanquiazul no gana en Liga desde el 5 de octubre, en el duelo ante en Mallorca en el RCDE Stadium.
El resultado ante el Girona fue dura, pero la imagen todavía fue peor. Sin intensidad ni energía, el Espanyol salió a verlas venir, una actitud insuficiente para competir en Primera División. Durante el partido incluso se escucharon gritos de «a segunda» de la afición local, cánticos dolorosos pero que pueden convertirse en una realidad.
Necesita reaccionar la entidad blanquiazul cuanto antes porque la permanencia es un objetivo, pero también una necesidad deportiva, económica e incluso social. Tras el partido, el sector de la afición perica cargó sobre todo ante una propiedad que se esconde y no da ningún tipo de explicaciones.
EL FUTURO DE MANOLO, EN EL AIRE
Todo apunta a que la primera cabeza en caer puede ser la de Manolo González. Cuando un equipo no carbura, la solución más asequible es destituir al entrenador, una opción que cada vez coge más fuerza. Y según adelantó el periodista Matteo Moretto, el Espanyol ya trabaja para llegar a un acuerdo con Sergio González como sustituto.
Por el momento, lo que está claro es que el futuro de Manolo González pende de un hilo y su presencia en el próximo partido liguero ante el Celta no está para nada asegurada. No obstante, el técnico gallego cuenta con el apoyo del vestuario, un factor que podría ser clave para su continuidad a pesar del mal momento del equipo.
LA ECONOMIA ‘MANDA’
Con Manolo o con otro entrenador, el contexto sigue siendo el mismo en el Espanyol. El club perico construyó una plantilla para competir en Primera División sin invertir ni un solo euro debido a delicada situación económica de la entidad.
El mercado de fichajes de invierno está a la vuelta de la esquina, pero la complejidad de reforzar un equipo sin ningún tipo de inversión es enorme. Por ello, más allá de alguna incorporación puntual, el Espanyol se tendrá que aferrar a lo que tiene, y mirar hacia la cantera, donde hay jugadores con talento, que sienten los colores y que lo se dejarán absolutamente todo sobre el terreno de juego.
Reflexión, autocrítica y trabajo parece la mejor receta para un Espanyol que vive un momento muy crítico y que necesitará de la mejor versión de todos los implicados para sacar esto adelante.