Los familiares de tres de las personas que fallecieron el 1 de octubre de 2023 en el incendio que arrasó dos discotecas en Murcia van a presentar una querella contra las compañías aseguradoras de esas salas por un posible delito de fraude. Consideran que las cantidades que los locales tenían aseguradas (300.000 euros en el caso de Fonda Milagros, donde fallecieron las 13 víctimas del siniestro, y 1,2 millones en el de Teatre, donde se inició el fuego), representan una cifra “ruin y ultrajante para los familiares de las víctimas, por lo insignificante que resulta para cubrir las daños y perjuicios provocados”, y que los seguros tenían un “carácter fraudulento” porque no garantizaban una cobertura efectiva de la actividad asegurada.